Desde su detección en El Salvador, el Gusano Barrenador ha significado una amenaza directa al sector agropecuario del país, razón por la cual se han tomado una serie de medidas y estrategias para combatir dicho problema, el cual afecta a animales de sangre caliente y a los humanos en general.

Un total de 3,200 casos se han presentado, motivo por el cual las autoridades del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) de El Salvador, ha encabezado un plan nacional de control y vigilancia, obteniendo resultados positivos que permiten de una u otra forma el avance de dicha enfermedad.

Según las estadísticas brindadas por el MAG, a la fecha se han inspeccionado un total de 117,150 animales a nivel nacional, de los cuales, 75,379 han recibido tratamiento oportuno con ivermectina y doramectina: además de las 3,350 muestras de laboratorio que se han tomado.

El plan ejecutado es integral e incluye visitas de campo a fincas, mataderos, domicilios y clínicas, para seguir contrarrestando este problema que ha generado temor a los dueños de animales que ven en el gusano barrenador una amenaza latente.

La prevención se ha extendido a toda la cadena productiva: desde veterinarios hasta agroservicios. En total, se han realizado 257 visitas a farmacias veterinarias y 229 visitas a subastas ganaderas, reforzando la supervisión en puntos críticos del comercio rural.

Con este tipo de acciones, El Salvador vuelve a confirmar su alta capacidad de respuesta ante emergencias sanitarias que pueden afectar la salud, economía y el bienestar social de las familias salvadoreñas.